Due Diligence
En el entorno económico actual resultan cada vez más frecuentes la obtención de financiación bancaria o extrabancaria por parte de las empresas, la entrada en su capital de nuevos inversores, o directamente su venta a un tercero interesado. En este contexto, quien tiene intención de adquirir una empresa, o bien entrar en su capital u otorgarle financiación habitualmente efectúa un análisis del negocio a fin de conocer los aspectos críticos del mismo y evaluar de la forma más precisa posible de los riesgos existentes en la operación. Este proceso, que puede ser de mayor o menor complejidad, se denomina Due Diligence.
El término Due Diligence deriva del concepto de “diligencia debida”, pues la evaluación que se efectúa con los fines indicados lo es para determinar si la empresa actúa con dicha diligencia en todos los aspectos del negocio, o al menos en aquellos que son críticos para su continuidad.
Habitualmente, las dos áreas más ampliamente evaluadas son la económica y la jurídica del negocio, aunque no es infrecuente investigar respecto del uso de las tecnologías o el sistema de producción. Así que, en esencia, se pretende:
- Valorar la oportunidad de inversión. Si, como se
intuye inicialmente, hay expectativas fundadas de que sea rentable, y en qué
grado.
- Evaluar riesgos asociados a la operación y su naturaleza, a fin de determinar en qué medida la inversión puede fracasar o no ser rentable.
- Determinar el valor del negocio que sirva como referencia para marcar un precio (de adquisición, de ampliación de capital o de tipo de interés) de la operación.
En LeopoldoPons tenemos una
amplia y contrastada experiencia en la realización de Due Diligence en
los ámbitos jurídico y económico enmarcados en procesos de venta u obtención de
financiación, desde el acompañamiento al cliente o tercero interesado como en
condición de empresa independiente que efectúa la evaluación.